Las “habilidades blandas” son la base de la felicidad humana, y la felicidad humana es la base del compromiso, la productividad y el crecimiento corporativo de los empleados. Josh Bersin

Hace algunos años, cuando empecé mi empresa de formación de líderes, concerté una cita en una empresa multinacional en el área de tecnología para presentar mis servicios.

Me atendió un joven de recursos humanos, quien, al ver mi catálogo de servicios, me hizo un comentario y una pregunta que me sacó de base. Me dijo:

“Veo que usted solo enseña habilidades blandas, ¿No tiene algo más fuerte?”

El joven implicaba que mis programas eran demasiado suaves para sus ejecutivos. Las llamadas “habilidades suaves” se veían muy intangibles y no aplicables a su entorno en extremo tecnológico. En ese momento no llegamos a ningún acuerdo, pero, con el tiempo, la organización me contacto y me convertí en coach de muchos de sus líderes (luego supe que al chico lo dejaron ir algunos meses después de nuestra entrevista).

Esto que me sucedió no era extraño hace algunos años. Aun ahora, muchas empresas están enfocadas en desarrollar habilidades duras en sus líderes y dejan por fuera lo que se considera muy “suave”, en gran parte porque aún no se sabe con claridad cómo desarrollar estas habilidades.

Sin embargo, en los últimos años ha crecido la comprensión de que se requiere “algo más” para tener éxito en el mundo laboral y especialmente en el liderazgo.

En el su estudio “Workplace Learning Trends Report” del 2022, Udemy nos comparte: “Las habilidades más demandadas no se tratan solo de mantenerse a la vanguardia de la curva técnica. Habilidades relacionadas con el liderazgo, el trabajo en equipo, la comunicación, la productividad y el bienestar son fundamentales para el desempeño de cada empleado”.

De “Soft Skills” a “Power Skills”

La tendencia actual es a abandonar el nombre de “soft skills” o habilidades blandas y sustituirlo por “Power Skills” o habilidades de poder. Josh Bersin, consultor y renombrado líder en el campo del desarrollo de talento, nos dice “Paremos de hablar de habilidades blandas, son habilidades de poder”. (https://joshbersin.com/2019/10/lets-stop-talking-about-soft-skills-theyre-power-skills/)

Josh explica: “Las habilidades duras son blandas (cambian todo el tiempo, se vuelven obsoletas constantemente y son relativamente fáciles de aprender) y las habilidades blandas son duras (son difíciles de construir, críticas y requieren un esfuerzo extremo para obtenerlas)”.

En lo particular me encanta este cambio de nombre, porque llamarlas habilidades suaves causa confusión y resistencia. Muchas personas creen que estas habilidades ya se traen y que no hay que perder el tiempo en desarrollarlas, cuando se puede trabajar en otras habilidades duras más importantes. 

Josh menciona algunas habilidades de poder que en las empresas ni siquiera se mencionan como parte de los programas de desarrollo:

Sin embargo, el desarrollar estas habilidades en los líderes y equipos está siendo un reto, tanto para las organizaciones, como para los profesionales. Seguramente como profesional o como líder te estás preguntando: ¿Qué habilidades desarrollo y por dónde empiezo?

Nuestra empresa se dedica formar líderes en organizaciones. Esto significa que nos dedicamos al desarrollo de Power Skills relacionadas al liderazgo. En este sentido te comparto cuatro habilidades claves en las que puedes enfocar tu crecimiento como líder:

  1. Toma de decisiones y resolución de problemas
  2. Regulación de las emociones
  3. Colaboración con otros
  4. Facilitación del cambio

Ahora la pregunta del millón es, ¿Cómo desarrollo estas habilidades de poder? El más grande problema con estas habilidades es encontrar un proceso efectivo para desarrollarlas. A diferencia de las habilidades duras, que las desarrollas con capacitación y práctica, para las habilidades de poder requieres un enfoque más integral.

A continuación, te comparto el proceso que seguimos con nuestros clientes y que está basado en cómo aprende nuestra mente:

Cinco pasos para desarrollar tus “Power Skills”

  1. Toma consciencia. Lo primero es darte cuenta a dónde estás ubicado en cada habilidad. Para ello puedes auxiliarte con una encuesta 360, una reunión de retroalimentación con un jefe, un par o un coach, o hacer un autoanálisis sincero.
  2. Conoce la habilidad a desarrollar: Define el área en que vas a trabajar y comprende qué implica el desarrollo de esta habilidad. Para hacerlo puedes tomar un programa de estudio, leer un libro, ingresar a un curso online. Esto te ayudará a entender lo que se espera de una persona que tiene esta habilidad. Recuerda que conocer algo no significa saber hacer algo. Ahora que conoces el tema, comenzarás a trabajar en incorporarlo a tu vida.
  3. Enfoque intencional: Una vez que has comprendido el tema, debes comenzar a ser intencional en tu día a día para aplicarlo. Al principio tendrás que ser muy observador y estar atento y enfocado para buscar las oportunidades para desarrollar la nueva habilidad.  Habrá días en que lo olvidarás por completo, no te preocupes, entristezcas o juzgues, comprende que estás en un proceso. Lo importante es que seas intencional en buscar las oportunidades de aplicarlo.
  4. Práctica continua: De ahora en adelante, lo que requieres es práctica continua, que permitirá que la habilidad pase de ser algo forzado y aprendido a ser natural y automática. Automatiza tu éxito convirtiendo tus habilidades de poder en hábitos.
  5. Rendición de cuentas: El trabajo con una persona externa a quien le rindas cuentas de tu crecimiento será de mucha utilidad para desarrollar tus habilidades de poder. Algunas personas con las que puedes trabajar son: Un coach, un líder de tu empresa, un par, un familiar, un mentor. Ten cuidado en escoger a una persona sabia, con experiencia y prudente, que tenga como única agenda el ayudarte a crecer.

Para profundizar en el proceso escucha el podcast Nacisteparabrillar.com donde doy varios ejemplos de cómo he aplicado estos pasos en el desarrollo de habilidades de poder con mis clientes.

Desarrollar estas habilidades de poder no es fácil, pero es importante, pues para mantenerte relevante necesitas desarrollar habilidades que no pueden ser reemplazados por computadoras. Pero recuerda que en tu cerebro tienes la computadora más poderosa que existe, así que sí es posible para ti desarrollar estas habilidades de poder y convertirte en el líder profesional que naciste para ser.

Recuerda: ¡Naciste para Brillar! ¡Usa tus habilidades de poder para hacerlo!

Autocoaching

Comienza tu proceso de crecimiento con un autoanálisis de las habilidades que he mencionado en este artículo y determina cuáles están afectando tu desarrollo profesional. Haz un plan para crecer en ellas.

Tu coach,

Jessica Calderón