Ni tu presente ni tu pasado son profetas de tu futuro.

Paul Martinelli

Recientemente, platicaba con una ejecutiva que está comenzando una nueva etapa profesional. De joven se formó en la banca, hasta donde creció a posiciones ejecutivas. Hace un par de años se vio en la necesidad de retirarse anticipadamente de su empleo, por causa de una situación profesional difícil que vivió. Ahora que está iniciando una empresa de consultoría, se preocupa por cómo le afectó profesionalmente esta experiencia, y por el impacto que puede tener en su nueva carrera.

Como coach, parte de mi trabajo es ayudarle a las personas a ampliar su perspectiva para detectar nuevas oportunidades o superar obstáculos. Es por ello que, luego de escuchar su historia, le hice esta observación: “¿Se da cuenta de que usted puede convertir sus experiencias difíciles en éxitos?”.

En ese momento su cara se iluminó, y me dijo: “Si Jessica, eso es justo lo que voy a hacer en mis nuevos programas que estoy poniendo en el mercado”.

Todos podemos convertir nuestras experiencias en éxitos, ya sea que estemos en la etapa media de nuestra vida profesional, que hayamos experimentado un fracaso o que estemos queriendo reinventar nuestra carrera.

Hace más de una década, yo misma fracasé en mi primera empresa y me vi en la situación de tener que empezar de nuevo. Esa experiencia me afectó fuertemente, sacudió mi confianza y me dejó desconcertada y sin saber cómo recuperarme.

Sin embargo, aprendí tanto de esa primera empresa fallida, que mi segunda empresa ya lleva once años de crecimiento continuo. Y, además, fui capaz de crear programas y conferencias derivadas de esta experiencia y que ahora ayudan a miles de personas.

En los últimos años, hemos estigmatizado tanto el fracaso que se nos ha olvidado que la única forma de llegar al éxito es pasando por el proceso de experimentar y aprender de las experiencias vividas, ya sean buenas o malas. Sí escondemos estas experiencias difíciles, interrumpimos nuestro crecimiento, pues no aprendemos de ellas.

Pero si somos sabios, no solo aprenderemos de estas experiencias, sino que seremos capaces de convertirlas en éxitos profesionales.

A continuación, te comparto cinco acciones que te ayudarán a convertir tus experiencias difíciles en éxitos profesionales:

Cinco acciones para convertir tus experiencias difíciles en éxitos

  1. Analiza separando tus emociones: Cuando me ha tocado analizar fracasos con mis clientes, lo primero que hago es despersonalizar la experiencia. A veces le pido al cliente que piense que fui yo quien vivió la experiencia y le pido que me dé su perspectiva desde afuera. Solo así puede el cliente separar sus emociones de lo que pasó y ser lo suficientemente objetivo para aprender de la experiencia. Para ser más objetivo, te recomiendo, darte un tiempo para calmar tus emociones y apoyarte en un coach o un líder objetivo que te ayude a ver la situación desde afuera.
  2. Saca el aprendizaje de la experiencia: Hazte preguntas profundas que te ayuden a ver la experiencia desde una perspectiva de aprendizaje: ¿Qué provocó la situación? ¿Cuál fue mi rol? ¿Qué aprendí? ¿Qué haría diferente? ¿Qué puedo aplicar a mi carrera?
  3. Date tiempo a sanar: Date un espacio para sanar emocionalmente y avanzar. No te apresures a seguir adelante cuando aún estás en proceso de recuperación. Sin embargo, ten cuidado de no usar este tiempo como un espacio para recordar y rumiar acerca de lo vivido y quedarte estancado en una posición de víctima. Escucha a tu corazón para saber cuándo es el momento de avanzar. 
  4. Enfócate hace adelante: No se puede conducir un automóvil con la mirada puesta en el espejo retrovisor. Aun cuando la experiencia te haya sacudido, toma la decisión consciente de avanzar. Recuerda que tu crecimiento y tus oportunidades siempre están en tu futuro, nunca tu pasado. 
  5. Reinvéntate: Es el momento que decidas cómo actuarás a partir de ahora. Tú eres dueño de tu vida, de tu carrera y de tus acciones, así que puedes redefinirte y reinventarte cuando lo desees. Toma el aprendizaje y aplícalo a tu nuevo futuro profesional.

Los fracasos, traspiés, malas decisiones o experiencias profesionales difíciles no tienen por qué convertirse en una condena, porque al final de cuentas tú escribes tu futuro con las acciones que emprendes hoy.

Decide hoy mismo convertir tus experiencias difíciles en nuevos éxitos profesionales. Y vale la pena hacerlo, porque tú ¡naciste para brillar!

Autocoaching

Toma un tiempo para analizar una experiencia difícil que sufriste en el pasado y contesta estas preguntas:

  1. ¿Qué aprendí de ella?
  2. ¿De qué forma esta experiencia me hizo ser un mejor profesional?
  3. Si aún me siento afectado por la experiencia, ¿Cómo puedo usarla para mi crecimiento?

Tu coach,

Ayudando a lideres a crecer