Una vez que cambia tu mentalidad, todo lo demás cambiará con ella.
Steve Maraboli
¿Sabías que tu mentalidad determina cómo te presentas ante el mundo, como reaccionas ante las situaciones externas y, desde luego, tus resultados?
Tu mentalidad en este momento puede estar siendo tu mejor aliada o te peor enemiga. La buena noticia es que siempre hay espacio para crecer y formar una mentalidad que te lleve a donde quieres llegar.
Pero ¿Qué es eso de la mentalidad? Tu mentalidad es la suma de tus pensamientos, que en conjunto forman tu perspectiva y tus actitudes ante el mundo.
Tu mentalidad se ha ido formando a lo largo de tu vida, como resultado del ambiente, la formación y las influencias más fuertes en tu vida. Tu mentalidad es como un filtro que permite que tu talento, habilidades y capacidades salgan a relucir o queden atrapados entre paradigmas limitantes. Y es allí donde tu mentalidad puede estar siendo un obstáculo para tu crecimiento.
Carol Dweck nos introdujo al concepto de mentalidad fija versus mentalidad de crecimiento. Carol indica que una mentalidad de crecimiento es fundamental para tener éxito y destacar.
En el siguiente cuadro te comparto una comparación de una mentalidad limitada y una mentalidad de crecimiento.
Mentalidad Fija versus mentalidad de crecimiento
Recuerda que tu mentalidad es muy tuya, así que no te darás cuenta cuando te estés limitando. Lo que sí podrás percibir es una pared invisible con la que chocas continuamente y no te permite avanzar. Cuando te encuentres esta pared invisible, es una indicación clara de que estás chocando con un paradigma, que solo vas a poder superar cuando cambies tu mentalidad.
En los últimos años, se ha investigado mucho acerca del cerebro y de la mente, y se ha podido comprender que el cerebro siempre mantiene la capacidad de cambiar. Es lo que se llama neuro-plasticidad. Más aún, se ha encontrado que tú mismo puedes conducir este cambio en forma intencional. Y cuando cambias tu mentalidad cambian tus resultados.
A continuación, te comparto cinco acciones que te ayudarán a cambiar a una mentalidad de crecimiento.
Cinco acciones para cambiar a una mentalidad de Crecimiento
- Cambia de ambiente: El ambiente que te rodea influye mucho en la forma en que piensas. Sé intencional en rodearte de amigos y colegas con mentalidad de crecimiento. Pon una distancia sana con personas que te disminuyen, que te limitan y que carecen de aspiraciones y metas.
- Desafía tu perspectiva: Hazte preguntas profundas que te ayuden a ampliar tu perspectiva, por ejemplo ¿De qué me estoy atemorizando? ¿Qué pasaría si me atrevo? ¿Qué aprendí de este error? ¿Qué puedo hacer diferente esta vez?
- Alimenta tu mente en forma sana: Así como lo que comes influye en tu salud física, lo que escuchas, lees y metes a tu mente influye en tu salud mental. Sé intencional en escoger lo que dejas entra a tu mente, por ejemplo, limita programas de televisión, redes sociales y noticias. Incluye libros, programas y estudios que te ayuden a crecer.
- Enfócate tus metas: Los coaches aprendemos a enfocarnos en la dirección a dónde queremos llegar, en lugar de estancarnos en una historia limitante. Recuerda que a dónde va tu enfoque, va tu energía. Si te enfocas en tus metas y en tu crecimiento, tu mente conducirá todos tus recursos en esa dirección.
- Asume tu responsabilidad personal: Tú decides lo que piensas. Acepta esta responsabilidad y decide ser más intencional en pensar en la dirección que quieres ir. Aprende a administrar y reentrenar tus pensamientos para que sean automáticamente dirigidos a una mentalidad de crecimiento.
Finalmente, quiero añadir que, si realmente estás comprometido a cambiar tu mentalidad, es recomendable buscar ayuda experta de un coach, pues los coaches estamos capacitados para ayudarte a desafiar tus pensamientos y encontrar esas barreras que tú mismo te has puesto y que se te hacen difíciles de ver y romper por ti mismo.
Tú eres el resultado de tus pensamientos, pero tus pensamientos no son fijos. Cualquier limitación que hayas vivido hasta ahora, puede ser cambiada a una mentalidad enfocada al crecimiento, siguiendo estas recomendaciones en forma intencional y disciplinada.
Y vale la pena, porque tú ¡Naciste para Brillar!
Autocoaching:
Hazte algunas preguntas poderosas para determinar cómo te está ayudando o limitando tu mentalidad.
- ¿De qué forma reacciono ante el fracaso?
- ¿Cuál es mi actitud ante los desafíos?
- Cuando me enfrento a un reto ¿Qué hago para salir adelante?
Tu coach
Ayudando a Líderes a Brillar